En
el marco del proyecto ABP “¿Juzgas mi camino? Te presto mis zapatos”, los
alumnos de Segundo de la ESO han realizado dos actividades fuera del aula para
conocer de forma objetiva y directa la realidad de los refugiados. Es por ello
que asisten a la exposición “Pasajeros” y a una charla en la biblioteca de
nuestro instituto para conocer la vida real en un campo de refugiados sirios.
En primer lugar el uno de
febrero asistimos a la multiexposición
“Pasajeros”, situada en la Biblioteca Regional de Murcia. Esta exposición
nace con la idea de recurrir al arte como herramienta de diálogo entre la
ciudadanía y los refugiados residentes en los campos de Grecia. La exposición
tiene carácter itinerante y llega a Murcia tras su paso por otros países y
Comunidades Autónomas.
Cuenta con visitas guiadas, video instalación, réplica
de un campo de refugiados, exposiciones fotográficas, muestra de cuadros
realizados por los refugiados, charlas y cartas de refugiados. Nuestros alumnos
participaron activamente en la actividad recitando textos de Ibn Arabí y
pintando en el mural que se estaba pintando en la puerta de la biblioteca.
En segundo lugar,
concertamos una entrevista con la asociación Ayuda Refugiados Murcia (http://refugiadossiriosmurcia.es/).
Lorena y Paco son miembros de esta asociación y en diciembre del año pasado
cogieron el avión rumbo Ritsona. Permanecieron unas semanas en el campo de
refugiados que hay en esa ciudad para ayudar y comprobar en primera persona
cuál es la situación de los sirios que huyen de su propio país por culpa de la
guerra. Nos contaron relatos llenos de verdad y estremecedores.
Para los alumnos de nuestro
instituto ha sido una experiencia impactante pues han conocido las condiciones
inhumanas en que viven los refugiados sirios, las tiendas en las que habitan,
la comida que pueden conseguir, el frío del invierno que no pueden paliar y la
impotencia que tienen al no saber cuánto tiempo tendrán que estar en estas
condiciones. Han visto que son familias como las suyas que tenían su vida, su
trabajo, sus seres queridos, sus casas y que ahora se encuentran en medio de un
monte malviviendo, sin dinero, sin trabajo y sin esperanza. Las experiencias
personales de los propios voluntarios y de los refugiados que han estado en
contacto con ellos han sorprendido y concienciado a los alumnos de esta
realidad que políticos y fuerzas gubernamentales no quieren afrontar de forma
definitiva.